Pocos o ninguno apostaban por la permanencia, antes de la semana pasada. Algunos esperaban el milagro, pero solo esos que son hinchas hasta la medula confiaban en revivir aquella vibraciones que en su día metió ese "bigoton" llamado D. José Manuel Esnal "Mane".
Seguro que con su congeladora tranquilidad, haya donde estuviera ayer el bueno de Balmaseda echaría una sonrisa picara, unos minutos después de que acabara el partido en Balaidos.
Ese es el ejemplo del desauciado hincha del Deportivo Alavés, sufridor pero siempre esperando.Esperando en su día el resurgir del glorioso, y ese día llego ayer. Tuvo que ser después de acabar el partido, ya que el Cadiz puso a más de uno el corazón en un autentico puño.
El mejor resumen seria decir: "......ANIMO PUES VALIENTES DEPORTIVOS, ANIMO PUES VALIENTE AFICIÓN"
No hay comentarios:
Publicar un comentario