Estoy mirando por la ventana, de el cuarto donde tengo el “ordeñador” y veo una noche de perros (agua, granizo y 10,6º a las 0.18h.).
Hace cuatro días, como aquel que dice nos quejábamos de que no caía ni gota de agua y mira tú por donde, estamos con uno de los peores inviernos de los últimos años.
Hemos tenido chubascos, chubascos torrenciales, nevadas y hasta ciclones explosivos. Se han tenido que abrir -en un par de veces- las compuertas de los pantanos que nos dan de beber ha Bizkaia y Álava, se ha estado ha “un tris” de que el Nervion se enfadara como en aquellas terribles inundaciones de los 80.
(MÁS, EN EL ACCESO SUPERIOR MIS HISTORIAS)
Hace cuatro días, como aquel que dice nos quejábamos de que no caía ni gota de agua y mira tú por donde, estamos con uno de los peores inviernos de los últimos años.
Hemos tenido chubascos, chubascos torrenciales, nevadas y hasta ciclones explosivos. Se han tenido que abrir -en un par de veces- las compuertas de los pantanos que nos dan de beber ha Bizkaia y Álava, se ha estado ha “un tris” de que el Nervion se enfadara como en aquellas terribles inundaciones de los 80.
(MÁS, EN EL ACCESO SUPERIOR MIS HISTORIAS)
No hay comentarios:
Publicar un comentario